Arbancón, es un municipio de la provincia castellana de Guadalajara que cuenta con una población de algo más de 150 habitantes. Este pueblo, de arquitectura dorada, se encuentra a las puertas de la Ruta de los Pueblos Negros y con orgullo luce en sus calles la bandera de Pueblo Mágico de España, asociación a la que pertenece.
Historia de Arbancón
Tras la reconquista el pueblo perteneció a la vecina localidad de Cogolludo. Estuvo bajo el señorío de la Orden de Calatraba y más tarde sobre el de Don diego Hurtado de Mendoza hasta finales del siglo XV, que pasaría definitivamente a las manos de los condes de Medinaceli. Esto sería así hasta 1721, cuando consiguió el título de villa tras luchar por él y construir en el pueblo todo lo que se necesitaba para la concesión del título de manos de Felipe V.
Algunos dicen que cuando Cristóbal Colón visitó Cogolludo para ver a los condes, este se alojó en Albarcón y allí probó el cordero. Pero si hay un personaje ilustre, este es Joseph Hidalgo Gutiérrez, nacido en el pueblo a mediados del siglo XVIII, el cual influyó mucho en el crecimiento de Arbancón. Este también fue alcalde del pueblo y un ilustrado que lo dio todo por el pueblo dando trabajo a las mujeres pobres, instruir a las niñas o plantar una gran cantidad de árboles en la zona como los chopos de la zona de al lado del río y mejorar el regadío y mejorar las técnicas de labranza o por último empedrar las calles.
Qué ver en Arbancón
Esta bonita villa cuenta con un montón de lugares que ver y disfrutar y si no te quieres perder ni un detalle aquí te dejamos la audioguía del pueblo.
Iglesia de San Benito Abad
Estas es una fantástica obra arquitectónica renacentista del siglo XVI, aunque tiene otras partes del siglo XVII. Durante su construcción los vecinos aportaron todo lo que tenían para que esta saliese adelante. Su torre y campanario durante siglos estuvo rematada por un chapitel cónico de pizarra. En la actualidad este ya no existe porque según cuentan un rayo cayó sobre él y lo destruyó por completo. Además, las campanas que hoy lucen fueron arrojadas al suelo durante la Guerra Civil, cosa que se ve aún en las molduras de la torre que siguen rotas.
Si por algo destaca esta iglesia es por su bonito y único retablo mayor de la región que sobrevivió a la Guerra Civil. De este destaca San Benito Abad, que es el patrón del pueblo. De este destaca el dorado, el cual no fue siempre así, ya que el pueblo trabajó mucho para que fuese pintado porque durante mucho tiempo lucio en madera.
Museo del Apellido
Este parque, al lado de la Iglesia de San Benito Abad, era el antiguo cementerio de la localidad. En él nos vamos a encontrar un bonito jardín con una gran cantidad de escudos heráldicos con los apellidos de los vecinos de la localidad.
Plaza de los Cuatro Caños
También conocida como Plaza Mayor o del Ayuntamiento, es el lugar de reunión de los vecinos del pueblo. Presenta un trazado irregular y de esta destaca la casa consistorial levantada en el siglo XIX sobre los restos de la antigua casa del concejo, del que destaca la torre del reloj.
Su nombre viene por la gran fuente de piedra talla con cuatro caños. En sus orígenes al parecer esta era la picota del lugar donde se colocaban los comunicados de la villa para los vecinos.
Plaza de la Picota
Esta plaza fue utilizada durante mucho tiempo como lugar para celebrar las fiestas o como plaza de toros. La picota del centro, que no es la original, fue uno de los requisitos indispensables para que el pueblo fuese villa. Aquí era donde exponían a los reos para escarnio público. La picota actual fue colocada en 2021 para conmemorar el tercer centenario del título de villa.
En esta plaza también encontramos el pabellón de caza de los duques de Medinaceli. Esta es una casona-palacio del siglo XVI. Dicen que desde este hay un pasadizo que los llevas a hasta su palacio en Cogolludo.
Museo de Historia y Costumbres
Situada en la plaza de la picota, este museo cuenta con dos plantas, la de arriba tiene exposiciones itinerantes, mientras que la planta baja se centra en la figura de la Botarga. Esta figura representa una criatura que sale durante la fiesta de la Candelaria el 2 de febrero acompañando a la virgen. Su origen es precristiano y sirve para ahuyentar los malos espíritus y favorecer las cosechas.
Cocedero de vino de Arbancón
Aunque actualmente vemos un pozo y unos bancos, en este lugar se ubicaba el cocedero de vino de la localidad. Y es que las viñas y el vino es muy importante para esta localidad, y muchas de las casas contaban con cuevas donde conservar el caldo.
Fuente de la calle Estrella
Muy cerca de la iglesia nos vamos a encontrar con una preciosa fuente muy decorada durante la Noche de las velas.
Paseo mágico de Arbancón
A las afueras de la localidad, cerca de los campos de girasoles, nos encontramos con este bonito museo al aire libre.
Hay otros lugares que puedes visitar como la Ermita de la Soledad, no muy lejos del pueblo, y la Fuente Vieja.
Noche de las Velas
Esta preciosa fiesta de la Noche de las Velas se celebra durante el mes dos semanas del mes de julio. En ella más de 10000 velas alumbran los lugares más bonitos de la localidad, así como sus calles, trasportándonos a un lugar lleno de magia y belleza difíciles de olvidar.
Además, con tu entrada ayudarás a los vecinos a prender la gran cantidad de fósforos que hay por todas las calles de la localidad.
Los vecinos también colaboran y decoran sus casas de manera muy especial. Dando lugar a algunas fachadas sacadas de un cuento de hadas.
Desde las diez de la noche que se apagan las luces hasta bien entrada de la madrugada podemos pasear por todos los lugares de la localidad y asistir a eventos tales como conciertos o visitas guiadas.
Esta se celebra en otras localidades, siendo la más conocida de todas Pedraza, hay otros lugares como Titaguas, Vejer de la Frontera o Rodalquilar.
Dónde dormir y comer en Arbancón
Aunque hay diferentes casas rurales donde alojarse en este pueblo tan maravilloso, nosotros elegimos El Balcón de Arbancón. La simpatía y amabilidad de Isa, su dueña, junto a la gran comida que pudimos disfrutar, unas raciones muy grandes y baratas hicieron de nuestro paso por Arbancón unos días inolvidables. También da fe de ello que su gran terraza que suele estar abarrotada de gente hasta bien entrada la noche. Una magnífica elección para disfrutar a la luz de las velas.
Cerca de esta localidad podemos visitar otros bonitos pueblos como Hita, Cogolludo, Sigüenza, Atienza o Brihuega.