Brihuega es un pueblo de la provincia de Guadalajara que bien podía estar en la Provenza Francesa. Con apenas algo más de 2400 habitantes, cada mes de julio va incrementando el número debido a la gran cantidad de turistas que reciben por sus característicos campos de lavanda. Pero Brihuega es mucho más que lavanda, ya que posee el título Conjunto Monumental Histórico-Artístico desde 1973 por su precioso casco antiguo. Podéis consultar la web de la oficina de turismo para estar informado de toda las actividades que se realizan. Este luce con orgullo la bandera de Pueblo Mágico de España, asociación a la que pertenece.
Historia de Brihuega
Encontramos ciertos vestigios celtíberos y visigodos durante la época musulmana que perteneció al Califato de Toledo. Después de la Reconquista, comienza a repuntar como núcleo urbano de importancia bajo el nombre de Castrum Brioca o castillo sobre la roca. Alfonso VI de Castilla llegó a vivir en el castillo de la localidad durante un tiempo tras salir de la corte por problemas con su padre. Una vez convertido en rey, lo donó a la archidiócesis toledana bajo el señorío del Arzobispo don Rodrigo Ximénez de Rada, donde se construirían los principales monumentos religiosos de la localidad.
Los tres últimos siglos de su historia han estado marcados por los conflictos bélicos decisivos, como en 1710 con la Batalla de Villaviciosa y el Asalto de Brihuega. Estos acontecimientos fueron determinantes para el ascenso borbónico a la corona de España. En 1808 tuvo lugar varías batallas de la Guerra de la Independencia. Durante la Guerra Civil, en 1937 fue ocupada por tropas italianas enfrentándose a las tropas republicanas dando lugar a una famosa batalla.
Qué ver en Brihuega
No es todo lavanda en este bonito pueblo del corazón de la Alcarria. Su arquitectura es muy típica de esta zona, con calles estrechas y sinuosas con arquillos que comunican las calles entre sí.
Campos de Lavanda de Brihuega
La mayoría de personas que visitan Brihuega lo hacen motivadas por la belleza de los campos de lavanda que se encuentran a las afueras del pueblo. Este cultivo símbolo de la ciudad se concentra en los alrededores en más de mil hectáreas.
La fecha adecuada para visitarlos a finales de junio y julio al completo para disfrutar de su máximo esplendor. Los campos más cercanos al pueblo están completamente masificados por los turistas que parecen hormigas blancas entre la lavanda. Te recomendamos que avances por la carretera y que busques un sitio perfecto con el que poder estar en solitario.
Brihuega durante estas fechas celebra el Festival de la Lavanda, por lo que todo el pueblo está decorado con motivos de color morado. Además, dentro de cada local podemos encontrar productos derivados de esta flor.
Consejo fotográfico
Vístete de blanco para resaltar en tus capturas entre los campos de lavanda de Brihuega. Recomendamos ir al atardecer que es cuando tendrás la mejor luz. Puedes llevarte un buen macro para poder hacer primeros planos de la flor e incluso intentar captar alguna abeja en ellas. La fotografía nocturna también es una buena opción. Otra flor que nos encontramos cerca son los girasoles, por lo que no dudéis en parar y disfrutar de ellos.
Castillo de la Piedra Bermeja
Construido por los árabes, posteriormente fue ampliado por los cristianos, dándole un estilo románico. En el siglo XII se convirtió en palacio-fortaleza con una función más para el disfrute que para la guerra.
Está abierto los fines de semana y es muy recomendable subir arriba para tener unas vistas increíbles de los alrededores, ya que el precio es muy económico.
Iglesia de Santa María de la Peña
Ubicada cerca del castillo data de principios del siglo XIII. En su interior se conserva la talla románica de la Virgen de la Peña, patrona de la villa. Cerca de esta se encuentra el Convento de San José, fundado en 1969 por Juan de Molina. Tras la desamortización de Mendizábal se convirtió en hospital, cárcel y escuela. Actualmente, es el Museo de Miniaturas del Profesor Max.
Plaza del Coso
La Plaza del Ayuntamiento es donde se ubica el consistorio. También destaca en este otros lugares como algunas de las diferentes fuentes repartidas por diversos lugares del pueblo y la entrada a las Cuevas Árabes construidas entre los siglos X y XI que forman un laberinto que recorre el subsuelo del pueblo.
Otros puntos destacados del pueblo son las murallas de origen árabe, a día de hoy se conserva la Puerta de la Cadena y la Puerta del Corazón. La Real Cárcel De Carlos III es la actual oficina de turismo y biblioteca que data del siglo XVIII. La Real Fábrica de Paños construida por Fernando VI cuenta con unos preciosos jardines. La Iglesia de San Felipe del siglo XIII que sufrió un incendio en 1904 que arrasó su techo e interior y la Iglesia de San Miguel, actualmente desacralizada. Ambas iglesias son de estilo o románico de transición al gótico.
Tras visitar este encantador pueblo podemos movernos a otros lugares cercanos como por ejemplo Atienza con su precioso castillo, Medinaceli, Siguënza o su pedanía Pelegrina.
