Los Museos Capitolinos, aunque en realidad es uno solo con varios edificios unidos por un pasaje subterráneo, es uno de los principales museos de Roma junto con los del Vaticano. Son los más antiguos del mundo, pues se fundaron en 1471. Su nombre hace referencia a la colina donde está ubicado, la Capitolina.
Historia de los Museos Capitolinos
Como hemos dicho, fue fundado en 1471 gracias a la donación del Papa Sixto IV a la ciudad de Roma. Las obras, entre ellas la famosísima Loba Capitolina, fueron instalados en el patio del Palacio de los Conservadores.
Con el tiempo se ampliaría al Palacio Nuevo en 1654, ambos situados en la Plaza del Campidogilio, por la gran cantidad de obras que llegaron con nuevas donaciones papales. Pero no sería hasta 1734 cuando este abriese sus puertas al púbico.
Qué ver en los Museos Capitolinos
Necesitarás más o menos dos horas para observar todas las obras que componen este museo.
La Loba Capitolina
Esta también es conocida como Loba Luperca que amamanta a Rómulo y Remo, es el símbolo de Roma. Quienes fundarían la ciudad de Roma y tras una disputa por el lugar, Rómulo matará a Remo y lo hará este sobre el Palatino en el 753 a. C.
No se sabe mucho del origen de esta figura y aunque hay varias especulaciones, parece ser que es medieval, aunque los gemelos son renacentistas. En Mérida, encontramos una copia de la escultura Donada por la ciudad de Roma en 1997 con la inscripción “La ciudad de Roma a la ciudad de Mérida, ayer Augusta Emerita. 20 junio 1997”
La estatua ecuestre de Marco Aurelio
Es una estatua del emperador Marco Aurelio de bronce con más de 4 metros de altura construida en el siglo II, en concreto, en el 176 a. C. Actualmente, hay una en la Plaza del Campidoglio donde se encuentra el museo.
Restos escultura de Constantino
De esta gigantesca escultura del siglo IV d. C. solo podemos ver algunos fragmentos. Esta representa al primer emperador cristiano exhibido completamente desnudo. Fue encontrado en el Foro Romano.
Sala de los Filósofos y los emperadores
En la primera sala encontramos un montón de bustos de filósofos y oradores de la antigua Grecia, cuyas imágenes en el Renacimiento decoraban bibliotecas públicas y privadas. Mientras que en la segunda vemos esculturas de los emperadores romanos y parte de su familia expuestos en orden cronológico.
Galo moribundo
Esta representa a un galo herido y es una copia romana del original griego del siglo III a. C.
Venus capitolina
Esta es una réplica de la escultura griega del siglo IV a. C. en la que Venus, también conocida como Afrodita, sale del baño desnuda.
El Espinario
Esta es una estatua de bronce del siglo I a. C. que representa a un chico que se saca una espina del pie mientras está sentado.
Marforio
Este gigante acostado o más bien reclinado es en realidad un Dios de un río. En su tiempo este parece que estaba ubicada en el foro de Augusto.
Pinacoteca
En los Museos capitolinos también podemos hablar de su pequeña pinacoteca con algunos importantes cuadros.
Cerca de este encontramos el Foro Romano y el Coliseo, por lo que no dudes en darte un paseo por ellos en tu ruta por Roma.