La Ruta de la Cascada del Purgatorio es una fantástica caminata por el norte de Madrid, más en concreto por el Valle de Lozoya. Esta comienza a las afueras del pueblo de Rascafría. Durante el paseo disfrutaremos de baños naturales, bosques y una hermosa cascada final. La ruta consta más o menos con unos 15 km de ida y vuelta, pero siempre podemos coger caminos alternativos y hacerla más grande. Debido a las aglomeraciones es mejor evitar el verano y los fines de semana.
Monasterio Santa María de El Paular
Nuestra primera parada y el inicio de nuestra ruta será este excelente y maravilloso lugar a las afueras de Rascafría. Su construcción comenzó en 1390 y sería Juan I de Castilla el que pondría la piedra de unas obras que durarían varios siglos. La vida de los monjes en el monasterio se vería interrumpida en el siglo XIX debido a la Guerra de la Independencia y las diferentes desamortizaciones. Este fue comprado por un particular, pero tiempo después sé lo se lo volvería a comprar el estado. La vida religiosa volvería de las manos de Franco en 1942 tras un viaje a Monserrat en el que le gusto tanto el ambiente religioso que decidió trasladarlo a Madrid.
Puente del Perdón
Ubicado sobre el río Lozoya data de mediados del siglo XVIII. No fue el primero que se erigió en este sitio, ya que el original fue construido a principios del siglo XIV tras las duras crecidas del río en invierno.
Consejo fotográfico
Si quieres tener una foto única y digna de una postal, tienes que alejarte un poco y componer en primer plano el puente y al fondo las montañas y el monasterio.
Las Presillas
Una atracción muy veraniega, puesto que estas son unas piscinas naturales del Río Lozoya. En la época que nosotros la visitamos estaban completamente desbordadas, pero en verano estas se masifican y sus grandes praderas verdes se llena de gente comiendo, tomando el sol y jugando. Llegar hasta ellas es fácil y en época estival tiene un parking de pago. Desde aquí tenemos unas preciosas vistas del pico de Peñalara.
El camino hacia la Cascada del Purgatorio
Una vez hemos andado un poco comienza la verdadera ruta. En la ruta encontraremos letreros que nos indican el camino hacia La Cascada del Purgatorio.
Tendremos que tener cuidado, ya que podemos encontrar alguna granja de ganado equino y algunas reses sueltas que aunque no son peligrosas.
Nos toparemos con bosques de pinos silvestres y vegetación de ribera como alisos, sauces, arces, fresnos o abedules mezclados con grandes rocas recubiertas de musgo. Cuando estamos más cerca nos encontraremos grandes paredes de piedra verticales que forman las peñas del Purgatorio.
Consejo fotográfico
Simplemente disfruta y dispara todo lo que puedas porque vas a encontrar una gran cantidad de paisajes que te dejaran con la boca abierta.
Cascada del Purgatorio
Cuando hemos atravesado la parte más difícil y el final del camino, llegamos al mirador de la cascada del arroyo del Aguilón, afluente del río Lozoya. Al parecer se llama así porque los monjes utilizaban esta senda como símbolo de purificación.
En la época que nosotros lo visitamos, esta caía con tanta fuerza que las gotas de agua en suspensión en el aire llegaban hasta el mirador donde nos encontrábamos.
Consejo fotográfico
Depende de la época del año en la que la visites te podemos recomendar que intentes inmortalizar la fuerza de la cascada si tiene mucho caudal, pero si esta está mucho más tranquila te recomendamos una larga exposición para captar el recorrido del agua .
A la vuelta tenemos varias opciones hacer el camino de vuelta, volver por el mismo o tomar otras alternativas que seguramente no te decepcionaran.
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Si estás en esta zona y quieres desplazarte a otro lado porque aún tienes tiempo, obviamente te recomendamos que visites el pueblo de Rascafría o Lozoya y si tienes tiempo aún puedes acércate hasta la Buitrago de Lozoya, pero también puedes cambiar de provincia, ya que está muy cercana y ver El Real sitio de San Ildefonso o la misma Segovia.
